Final UEFA Champions League 2011-12

Chelsea FC, campeón del UEFA Champions League 2011-12

"Robi fue un jugador, que incluso por aquel entonces, pensaba mucho en la táctica. Fue autodidacta, continuó aprendiendo mucho y siempre ha sido un estratega defensivo" Así se expresaba el seleccionador alemán Joachim Löw al hablar de Roberto Di Matteo (Schaffhausen, Suiza, 1970) entrenador del Chelsea FC, horas antes de empezar la final de la Champions League 2011-12. Roberto es un ser excepcional y sencillo, por eso el que fuera compañero y capitán del equipo en el FC Aarau de Dinamarca Ryszard Komornicki le recuerdo con cariño y explicaba esta anécdota: “El entrenador Fringer nos había dicho que nos preparamos físicamente durante las vacaciones. Cuando empezamos la pretemporada de nuevo le preguntó a Roberto que había hecho durante el verano y Robi le respondió que había pasado las vacaciones jugando a los bolos todos los días. Si se mantiene relajado, puede llegar lejos. Está a 90 minutos de saborear la gloria en la UEFA Champions League, así que podemos asegurar que su camino ya ha comenzado”. Un Rolf Fringer que siempre creyó en él, "Incluso cuando tenía sólo 20 años ya hablaba de sistemas y tácticas. Y con su técnica y su inteligencia para el fútbol ya era una estrella en ciernes. Rápidamente se convirtió en mi mano derecha sobre el campo".

Roberto Di Matteo, entrenador del Chelsea FC

El Bayern Arena está a reventar esta noche de sábado en Munich. El equipo anfitrión va a disputar su novena final de Copa de Europa, con un balance de cuatro victorias y cuatro derrotas. Mientras que el equipo visitante, el Chelsea, solo ha jugado una, la que perdió por penales contra el Manchester Utd. en 2007-08. El centrocampista del Bayern Bastian Schweinsteiger (Kolbermoor bei Rosenheim, Baviera,1984) declaraba antes de empezar el encuentro: "Estamos muertos pero muy contentos. Desde que se anunció que la final sería en Múnich hemos hecho todo lo posible para estar aquí. Lo único que pasaba por mi mente en la tanda de penaltis es que tenía que mandar el balón al fondo de la red" refiriéndose a la dura semifinal que se decidió en la tanda de penaltys contra el Real Madrid.

Frank Lampard y Bastian Schweinsteiger

El Chelsea, llega con la moral por las nubes, desde la agónica clasificación en la fase de grupos en el ultimo partido contra el Valencia CF, el partido contra el Nápoles en octavos de final dándole la vuelta al marcador en contra de 3-1 en Standford Bridge, el partido contra un Bénfica herido en cuartos de final y la épica clasificación contra el FC Barcelona en semifinales jugando el partido de vuelta con uno menos por expulsión de John Terry. No en vano afirmó el entrenador del Bayern de Munich, Jupp Heynckes (Mönchengladbach, 1945) sobre el Chelsea, "Tiene jugadores con mucha experiencia en su equipo, y está claro que los veteranos, los jugadores que llevan muchos años en el Chelsea, quieren ganar algo grande. Y eso es peligroso para nosotros". Heynckes que ya ganó una Champions League en 1998 con el Real Madrid, explicaba el factor ventaja de jugar en casa y comentó, "Es algo especial disputar la final en tu propio estadio. Es algo extraordinario, algo que lleva sin ocurrir desde 1965, algo histórico. Así que, por supuesto que sería algo espectacular ganar la final".

El Chelsea quiere ser el primer equipo de Londres en ganar tan preciado trofeo del fútbol mundial. Tanto es así que incluso David Luiz, jugador del Chelsea nacido en Brasil, se siente atrapado por esta atmósfera de Champions. En opinión del jugador , "Cuando uno juega contra grandes equipos, uno siempre siente presión. Uno tiene presión en el primer partido de la temporada y en la final de la Champions League. El Bayern es un gran equipo. La gente sigue hablando de que ellos juegan en casa y de que esto resta presión al Chelsea un poco, pero los jugadores aquí saben lo importante que es ganar esta final". De igual modo se expresaba el capitán del Bayern, Philipp Lahm (Munich, 1983) sobre la final, sobre su hogar, "Nuestro sueño era jugar la final y nosotros estamos aquí. Todavía no hemos terminado, ya que queremos ganar esta copa y nosotros tenemos todavía un duro trabajo por delante, pero ya es grande el estar aquí en casa. Nací en Múnich, crecí en Múnich y llegué al Bayern con 11 años, así que definitivamente este es mi hogar. Cuando miras alrededor de la ciudad, todos son felices. Hay muchas ganas".

Jupp Heynckes, entrenador del Bayern Münich

En esta noche mágica el árbitro portugués Pedro Proença silbato en mano a punto de dar salida al último partido de la Champions 2011-12. El partido empieza, sigue y continua, con un aplastante dominio del equipo alemán. El Chelsea agazapado, esperando a la contra para lanzar un zarpazo certero que les de le la victoria. La sorpresa, la incorporación de Ryan Bertrand que debuta en esta champions nada más y nada menos que en la final. Hasta el minuto sesenta muchos se empezaron a acordar de aquellos equipos que no están, hacerlo, es no amar este deporte. La cosa estaba clara, una de las leyes del fútbol dice que el equipo que más pisa el área, acaba marcando. Y así fue. En el minuto 83, un centro al área inglesa y tras un despiste de marcaje de Ashley Cole Müller remata con más coraje que acierto, ya que el balón bota en el suelo haciendo un movimiento extraño que despista al portero Petr Cech. La final parecía sentenciada. Müller estaba exultante. Di Matteo, saca a Torres, que revolucionó el partido. Corría el minuto 88 cuando Juan Mata bota un córner en la esquina derecha de donde defiende el Bayern, Boateng es el encargado de seguir a Drogba, pero es inútil. El marfileño se salta marcando los tiempos reglamentarios según el manual del remate de cabeza, encarando la cara a portería, Neuer toca el balón pero va con tal fuerza que este prosigue su camino al fondo de la red. Increible pero cierto. Corría Didier, para lanzarse de rodillas sobre el césped, mientras aprovechaba la aceleración del impulso para santiguarse. Esto, empezaba a ser una final, “del no se vaya todavía que aún hay más”. En tiempo de prórroga más suspense. El colegiado portugués se hace el sueco en un más que posible penalty sobre Torres en el área alemana y acto seguido si vé uno clarísimo de Drogba a Ribery que tiene que abandonar el encuentro lesionado. Drogba pasó en un instante de héroe a villano. Parece que todo el partido va en una dirección. Robben, se dispone a lanzar el penalty y lo detiene Cech, acertadísimo en este y en todos los penaltis de la final. Robben al que ya llaman “El Maldito” no se lo puede creer.

Arjen Robben, en el momento de chutar el penalty en la Prórroga.

Jupp comentaba: "La culpa es nuestra por tener tantas ocasiones de gol y no materializarlas. Cuando marcas en el 83’ hay que mantener esa ventaja".

Y llegamos al momento fatídico, el de los penaltys. El primero en lanzar, es el capitán del Bayern Phillip Lahm. Cech, gran estudioso del fútbol, se conoce al dedillo la forma de lanzar de sus rivales. Cuatro pasos atrás y para adentro. Petr, logró tocar el balón. Es el turno de Mata, se le raro, algo pasa, lanza y para Neuer. Sabía donde quería tirarlo pero a media carrera cambió de opinión y ese fue su error. Le toca el turno a Gomez, tranquilo, como los grandes goleadores, per un poco perdido en esta final. Lanza y Cech le adivina el tiro, pero nada puede hacer para detenerlo. Turno para el Chelsea, David Luiz a los once metros. Once metros donde está el balón porque él se fue diez pasos atrás. Coge carrerilla, la primera impresión es: “Este chaval la manda a la grada” pero nada más lejos de la realidad, lo que parecía un chupinazo, fue un disparo fuerte y colocado por toda la escuadra, que engañó totalmente a Neuer.

Más sorpresas para este tercer penalti y, lo va a lanzar el mismo Neuer. Con tranquilidad coge carrerilla y coloca ajustado al poste derecho de Cech que adivina la intención, pero nada puede hacer. Y le toca el turno al capitán inglés, Frank Lampard. Sobrio, como si esto no fuera con él, plantó el balón con serenidad, lanza, y encañona a Neuer con un disparo fuerte que se va un poco alto, casi acariciando el larguero, pero que acaba entrando al fondo de la portería. Se acerca el Croata Olic para lanzar el cuarto penalti para el Bayern, no da cuatro pasos atrás, solo da tres, mala señal, lanza ajustado al palo izquierdo y Petr Cech a mano cambiada ataja el balón. Le toca el turno a Ashley Cole, frío y rápido. Disparo fuerte ajustado al palo. Neuer adivinó la intención, pero no llegó a detenerlo.

La eliminatoria está igualada. Para el último penalty, se acerca Schweinsteiger. Planta el balón chuta muy fuerte y rebota en el palo izquierdo de la portería defendida por un Cech, que una vez más acierta sobre la dirección del chut. Los alemanes se temen lo peor. Drogba mira la portería y agacha la vista, el héroe, el villano y ahora, héroe otra vez, su disparo se cuela a la derecha de un Neuer que se había lanzado a la Izquierda. Los jugadores de Chelsea lo celebran por todo lo alto, los del Bayern, intentan asumir la derrota. Peleas en el palco para recibir la copa, Kalou sin camiseta y Drogba intentando levantar el ánimo a los jugadores bávaros. El fútbol, vuelve a enseñarnos otra lección de vida. 

Anotaciones del autor en la tanda de Penaltys

"El fútbol, como la vida, es a veces impredecible, es una locura. No creo que nadie hubiera podido predecir esto. Hemos tenido una temporada difícil". Roberto Di Matteo.